
Cuando aparecen algunos de los síntomas que se relacionan con el embarazo, es normal que quieras conseguir una manera fácil y rápida para confirmar tus sospechas, que por los momentos no incluya una engorrosa cita médica.
Las pruebas caseras de embarazo que se compran en la farmacia son una opción bastante confiable, económica y casi instantánea de saber si estás o no embarazada. El único requisito es saber usarlas bien, lo que se aprende fácilmente.
¿Cómo funciona el test de embarazo?
La base de su uso es la detección de una hormona especifica en la orina que se conoce como «la hormona del embarazo” y que lleva por nombre gonadotropina coriónica humana o hCG, por sus siglas en inglés.
La hCG es un elemento que el embrión produce luego de la fecundación. Su función principal es que el organismo secrete progesterona. Esta hormona puede ser medida tanto en la sangre como en la orina; en los test caseros se usa el segundo fluido por su facilidad, pero las pruebas médicas que puedes realizarte luego medirán la aparición de hCG en el torrente sanguíneo.
Los test caseros en su mayoría tienen una confiabilidad de 99%, si se hacen de forma correcta y se siguen las instrucciones. Lo importante es que la uses en el momento exacto.
Las ideales son aquellas que sean más sensibles, lo que significa que podrán detectar la concentración más pequeña de la hormona en tu orina. Están compuestos comúnmente por un mecanismo que incluye una tira impregnada con un reactivo que, al hacer contacto con la hormona, hace que la tira cambie de color.
¿Cuándo hacer el test de embarazo?
La indicación más general es que la hagas después de notar el retraso menstrual. Algunas pruebas caseras aseguran ser capaces de detectar si estás embarazada incluso antes de que se cumpla este período, pero en este caso la precisión es menor y la confiablidad disminuye.
La hCG es detectable aproximadamente a los quince días después del momento de concepción. Por eso es importante que esperes incluso si tienes la corazonada.
Si tienes un ciclo regular, un día de retraso es suficiente para que funcione y sea confiable. En el caso de tener una menstruación irregular, lo recomendable es que la realices a las 3 semanas luego de haber tenido relaciones sexuales sin protección.
Existe la idea de que la primera orina del día es la que tiene mayor concentración de hCG, pero en realidad puedes realizar la prueba en cualquier horario que te convenga.
¿Cómo hacer el test de embarazo?
Las pruebas caseras funcionan normalmente de la siguiente manera: las desenvuelves, remueves el material que protege a la tira impregnada del reactivo, y luego pones ese elemento en contacto con tu orina. Algunos dispositivos pueden pedirte que los hagas desde un contenedor o de forma directa. En cualquier caso, lo común es que lo debas hacer al menos por cinco segundos.
Después es importante que seas cuidadosa de que ningún otro liquido toque la tira. Si te lo permite el dispositivo, puedes volver a taparlo y ponerlo sobre un espacio seguro y plano. Ahora solo quedará esperar un mínimo de 3 minutos o un máximo de 5, para poder ver cuál es el resultado.
Lo más importante es que leas las instrucciones que trae el dispositivo que adquiriste, para que conozcas exactamente cómo usarlo y como saber si el resultado es positivo o negativo. Las más novedosas incluso tienen una línea o símbolo de control que te indicará si la prueba se realizó de manera exitosa.
Si el resultado es positivo, lo siguiente es agendar una cita médica para conocer todo lo que tienes que saber sobre tu nuevo estado. Si es negativo, puedes intentar nuevamente algunos días después si lo deseas.
Aquí te dejo un vídeo en donde aprenderás como realizar una prueba de embarazo